Erase una vez, existió un mundo mágico, de dragones, y princesas, de principes y payasos, de poetas y habladores... Era un mundo sin fronteras, al que podías llegar con tocar algunas teclas, sus habitantes lo llamaban "La blogosfera"...
Cuenta la leyenda, que hace muchos, muchisimos años apareció una princesita, que curiosa emigró a esta región, había escuchado tantas cosas fabulosas sobre el reino, que se fue a vivir allí, edificó en las fronteras un Respiro, un castillo de poemas, y desnudó su alma ante la mágia y armonía de aquel hermoso lugar.
Se codeó con sabios, poetas, politicos, bufones y trovadores, fue invitada al baile del reino, que ellos llamaban "coro", conoció a unos reyes, angeles encantados, hadas locas, mariposas parlanchinas y princesas, a las brujas del lugar, se enamoró de un Principe, y asi descubrió el Instinto salvaje de cada una de las fieras...
La princesa era tannn feliz, disfrutaba ser parte del esplendor del reino, de la alegria de las habitantes... Más con el pasar del tiempo, comenzaron sus sospechas... Algo no andaba bien, la mágia no era blanca, y por momentos, en el espacio se sentía la amargura y así, un buen dia simplemente sucedió...
Que tristeza... Todo fue mentira!... Una noche despertó y se dió cuenta que fue victima de un hechizo, que aquel lugar no era mágico, que su encanto no era puro, y que detrás de tanta belleza habían personas infectadas de un mal anónimo que los hacía volverse egoistas, que gozaban con dejar mensajes devastadores en los castillos vecinos, y que esos anónimos eran los mismos "amigos" que se mofaban de las debilidades de sus compañeros y hacían burla de ellas.
Y en ese mundo descarado, eran tan ineptos que después de tanto enredo, ellos mismos se abrazaban como señal de "hermandad", clavando la lanza mortal de la hipocrecía, en la espalda de los pobres ciegos que todavía creían, y de los otros que simplemente se hacían los tontos...
En el mundo de "armonia", no respetaban la vida, ni las decisiones de los habitantes, y muchos se auto-decretaban estrellas, amos y señores de un espacio que no tiene dueño, mucho menos estrellas, porque alli la libertad es un baluarte...
La princesa se cansó, eso no era para ella, y asi sin más, sin aquella venda, la dulce princesa retomó su rumbo, dejó atrás bufones, tontos y payasos, desechó lo inutil, y tomó lo bello, a su amiga parlanchina, a los versos de poetas... Se aferró a su principe, y echó a volar su Respiro que según los cuentos siguió vivo hasta la eternidad...
Me lo mando por email un gran amigo
mi padre
Gracias.
Una esta tan pendiente de un principe
que no logra ver a los buenos caballeros.
pues su para siempre es lo que se vive
cada dia
Un presente que sin darnos cuentas
llega al futuro.
Cuando quieras estar un rato conmigo cógeme y léeme y mientras lo haces piensa que te quiero.